el fantasma y el mito de la movilidad urbana
El augurio
El proyecto Quito Cables fue una propuesta de campaña de Mauricio Rodas que llegó a ejecutarse parcialmente. En cuatro años ha avanzado muy poco y la obra se encuentra suspendida desde el 2016. De momento no se sabe que pasará con este proyecto con la nueva administración.
En el 2014, previo a la elección del alcalde de Quito, se había propuesto en la campaña de Mauricio Rodas una solución vial que iba a resultar revolucionaria para la ciudad. La obra era realmente llamativa y captó de inmediato la atención de los ciudadanos. El sistema Quito Cables parecía ser una gran solución para los problemas de movilidad de la ciudad. Como propuesta de campaña sirvió para afianzar la candidatura de Rodas como la mejor opción para el mandato.
​
Hoy, después de cuatro años a muy poco de que Rodas finalice su periodo, la realidad de los Quito Cables dista mucho de lo que los quiteños habían esperado. Lo que parecía un proyecto revolucionario para la ciudad terminó siendo un espejismo de la obra pública. Los avances hacia encaminar el proyecto han sido muy pocos y la incertidumbre de la viabilidad para que se lo realice se hace cada vez más grande.
​
En un inicio la propuesta de campaña consistía en construir las siguientes cuatro líneas de Quito Cables que se integrarían al Sistema Metropolitano de Transporte.
​
Hasta la fecha solo se han ejecutado parcialmente los trabajos en la Línea Norte. Se empezó la obra levantando los cimientos para una de las estaciones que se ubica en el sector de Colinas del Norte. Sin embargo, el proyecto se paralizó meses después cuando varios vecinos se opusieron a la expropiación de los terrenos en otras locaciones del sector.
​
Por otro lado, el Cuerpo de Ingenieros del Ejercito, organismo al que se le concesionó la construcción, optó por abandonar el proyecto por la falta de un estudio competente y por incongruencias al momento de efectuar la adquisición de la maquinaria que impulsaría las cabinas.

Infografía por Pablo Dávila 2019